Mecanismos de Defensa Secundarios

Los mecanismos de defensa secundarios a diferencia de los primarios, aparecen en épocas tardías, preservando el criterio de realidad del individuo.

En este artículo hablaremos de 4 de ellos empecemos con: intelectualización, aislamiento, regresión y represión.

Intelectualización: se caracteriza por separar las emociones de los pensamientos, reconoce la emoción pero se le dificulta sentir empatía o sentirse afectado por lo que a otro individuo pueda pasar o sentir. 

Es decir, una persona que busca una respuesta racional a situaciones emocionales. 

Cuando pasamos por momentos dolorosos y tendemos solo a racionalizar lo que se siente sin permitirnos vivir la emoción como tal.

Aislamiento: es muy parecido al anterior solo que la persona puede sentir empatía o lo que el otro individuo siente, sin embargo este decide separar la emoción de la razón para un evento en concreto o situación en particular. 

Podemos encontrar este mecanismo de defensa en personas cuyas profesiones les exigen la toma de decisiones de manera racional como lo son los jueces, doctores, psicólogos.

Regresión: El individuo como su nombre lo indica regresa y adopta formas o conductas de su infancia que son inmaduras para su edad madurativa, con la función de evitar conflictos que son propios de la etapa que está viviendo. 

Un ejemplo de esto puede ser cuando un adolescente o adulto resuelve una situación formando pataletas, llorando desesperadamente o gritando solo para escapar de su realidad, sin conversar o hablar de lo que siente como una persona madura.

Represión: La persona tiene conciencia de lo que está ocurriendo, sin embargo decide voluntariamente omitirlo u olvidarlo, debido al malestar o incomodidad que le genera. 

Un ejemplo es cuando un niño vive eventos violentos en la infancia, reprimiéndolos de tal manera que de grande los olvida por completo para que no le genere malestar emocional.